Padre Cipriano Urgel y Villahermosa

Uno de los casos más sorprendentes que lleva como protagonista a La Iglesia y a unas almas en pena...

Un cura filipino, llamado Cipriano Urgel y Villahermosa, fue ordenado sacerdote a los veintisiete años, y se convirtió en el primer arzobispo de la Arquidiócesis de Palo.

El padre Urgel ejerció como párroco de una pequeña localidad de Filipinas, donde en los años 50 vivió uno de los casos paranormales  más extraños y a la vez más acogedor que se ha vivido en los últimos años... 

Cuando el sacerdote tenía 33 años, vivió su primera experiencia sobrenatural, mientras el ejercía sus oficios, sentía una presencia que le acompañaba a la iglesia.
Pero eso no era nada, cuando ocurrió el devastador tifón "Amy",e inundó la localidad en la que él vivía, volvió a notar presencias que le acompañaban en sus oficios. El padre, que quedó devastado por la gran destrucción que provocó el tifón, ya que se llevó a mucha gente por delante. Por lo que se encerró entre las paredes de la capilla de su parroquia y oró por todos los muertos, pero volvió a notar esa presencia, y no solo eso, cuando el padre rezó el "Ave María" escuchó una voz procedente de la capilla que le respondía con la mima frase, pero él estuvo solo en todo momento.
Asustado por lo que había presenciado, el sacerdote dejó de orar y se marchó a su habitación, aunque esa noche no pudo pegar ojo.

A la noche siguiente, el sacerdote volvió a la parroquia a orar, pero esa vez no fue una sola voz quien le contestó, si no que varias voces se pusieron a orar con él. El padre, miró para todos los lados, pero seguía estando tan solo como el primer día que comenzó a notar esas presencias.

Asombrado por esos sucesos sobrenaturales, el padre Urgel decidió investigar sobre esa parroquia para poder entender que es lo que estaba pasando, y descubrió que esa parroquia había sido anteriormente un cementerio. 

El Padre Urgel quiso poder acompañar a ese rebaño en sus noches de oratoria ya que para él eran "almas perdidas que hicieron su camino de regreso y que finalmente encontraron su descanso eterno”.