¡Bienvenidos, cazadores y cazadoras!
¿Sentís eso? Es esa curiosa sensación que te eriza los pelos de la nuca, de los brazos... Eso es porque sabéis que se acerca un nuevo secreto más que desvelar aquí, este viernes, de la ciudad de Madrid. Os anunciamos que este es un lugar muy popular y conocido dentro del mundo paranormal cuando hablamos de Madrid. Se trata de...
La Casa de las Siete Chimeneas
Situada en la Plaza Rey, 1, es la casa más famosa en el ámbito paranormal, además de ser la Sede del Ministerio de Cultura. Fue construida entre los años 1574 y 1577 por, según se dice, Antonio Sillero y Juan de Herrera, para el señor Pedro de Ledesma, aunque también se dice que fue mandado construir por un noble caballero de la corte como dote de su hija por el casamiento con un capitán del ejército.
Según cuenta la leyenda, allí vivieron el capitán Juan de Zapata y su mujer, la hija de un noble caballero de la corte de Carlos V, Elena, en el siglo XVI. Desgraciadamente, su vida como matrimonio fue muy breve, puesto que el capitán Zapata fue destinado a Flandes, donde falleció. Al poco tiempo, la joven Elena apareció muerta en su dormitorio, y su cadáver al poco después... desapareció.
Al no esclarecerse las causas de su muerte, se elaboraron diferentes hipótesis: Unos, decían que la dama no podía hacer frente a su pena por haber perdido a su marido y se suicidó; otros, comentaban que era además la amante del sucesor al trono, Felipe II, y que al contraer matrimonio con una dama de más alta alcurnia, Elena debía ser silenciada. En la corte se comentaba también, por aquel entonces, que dio a luz a una hija de la que nunca se supo nada, y que no se murió de pena, sino porque la asesinaron. Se formó tanto revuelo en la corte, que la Casa Real tuvo que tomar cartas en el asunto, y al querer examinar e investigar el cadáver, se descubrió que éste había desaparecido. Las sospechas recayeron entonces sobre su padre, y agobiado por los rumores e injurias contra él, se ahorcó desde una de las vigas de la casa.
Los sucesos paranormales salieron a la luz un tiempo después, cuando, en una noche de invierno, un joven observó que, en el tejado de la casa, se encontraba la figura de una mujer vestida blanco, con una antorcha en la mano y señalando hacia donde se encontraba el palacio real. Se comenta que, muchas noches, puede observarse a esta misma mujer deambulando por las chimeneas…
Más tarde, el edificio fue adquirido por el Banco de Castilla, que mandó levantar el suelo para poder instalar las cañerías. Y entonces, en el subsuelo, se halló el cadáver de una mujer con varias monedas de oro que se dataron por la época del reinado de Felipe II. Desde entonces, también se comenta que, durante las noches, su fantasma también se aparece por el sótano, haciendo tintinear unas monedas de oro.
Sin embargo, no fue éste el único suceso, ni tampoco la única inquilina de la casa.
Durante el siglo XVIII vivió también el propio Leopoldo de Gregorio, más conocido como el Marqués de Esquilache. Este señor, como ya se sabe por las clases de historia, empezó a proclamar, por el año 1766, normas de vestimenta y costumbres que no agradaron demasiado a los madrileños, hasta que se amotinaron y acudieron hasta la casa a buscarle. Uno de los mayordomos de la casa impuso una gran resistencia, pero finalmente pereció a causa de varios cortes y también algunos disparos. Sin embargo, al no encontrar al Marqués porque no se encontraba en casa, no se mató a nadie más. Desde entonces, se comenta que se ha visto la silueta de un sirviente deambulando por los pasillos de la casa.
Otra de las numerosas víctimas encontradas dentro de esta casa fue la de un hombre, hacia el año 1960, emparedado, sin que se conociese su identidad, siendo así un número más en la lista de cadáveres y fantasmas de esta misteriosa casa.
Una de las curiosidades más llamativas, es que se dice que sus siete chimeneas representan los siete pecados capitales...
Seguro que os morís de ganas de pasaros por la zona y ver si lográis captar a esa misteriosa mujer que deambula entre esas chimeneas... Aunque deberíais visitar la casa a medianoche, cuando las sombras salen más a jugar.
¿Qué os ha parecido? ¡Contadnos en los comentarios! Y ahora, una pregunta creativa: ¿Qué creéis que simbolizan esas chimeneas? ¿Estáis de acuerdo con la teoría más popular?
Os deseamos un buen fin de semana, lleno de sueños felices y descansos reparadores.
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