Lugares encantados de la ciudad de Madrid (Parte 4/10)

¡Feliz viernes, cazadores de lo oculto!

¿Tenéis ganas de conocer más lugares encantados de la ciudad de Madrid? ¡Continuamos con el tour macabro de lo paranormal!
Ya hemos visitado casas, museos, hoteles... Parece que todo puede estar encantado, ¿verdad? ¿Qué tipo de lugar nos queda aún por visitar? Pues... ¿qué tal un palacio?

El Palacio Real

Venga, seguro que sabéis de sobra dónde está, ¿a que sí? Exacto, está situado en la calle Bailén, s/n (entre la Calle Mayor y San Vicente) y es la residencia oficial del Rey de España, nombrada también parte del Patrimonio Nacional. Aunque los reyes ya no viven aquí, por lo que se utiliza más como lugar para ceremonias de Estado y actos solemnes.

También es conocido como el Palacio de Oriente, debido a que se encuentra en una plaza con el mismo nombre, que se lo debe a su vez por su ubicación, en el lado oriental de palacio.

Tras un incendio en el Real Alcázar de Madrid en 1734 que dejó un solar vacío, sirvió como excusa para construirlo posteriormente por orden de Felipe V. Comenzó en 1738 y muchos arquitectos conocidos participaron en su construcción (Filippo Juvara, Bautista Sachetti, Ventura Rodríguez...) y Francesco Sabatini fue quien lo concluyó. El primer monarca en habitarlo fue el rey Carlos III.

Se fueron realizando modificaciones tanto en las habitaciones como en los exteriores del edificio, según el monarca que estuviese viviendo en aquel momento, y algunas restauraciones durante la segunda mitad del siglo XX debido a los daños causados durante la Guerra Civil.

Según las supersticiones, antiguamente, los terrenos entre la cuesta de San Vicente y San Francisco El Grande estaban habitados por seres sobrenaturales como brujas, duendes y fantasmas, que se manifestaron durante el reinado de Alfonso VI y la construcción del Alcázar por verse perturbada su paz. 

Las historias cuentan que el antiguo Alcázar se incendió por culpa de estos seres, durante la Nochebuena de 1734.

También se dice que Felipe V ordenó que sacaran los ojos y le cortaran los brazos y la lengua a al primer arquitecto, Filippo Juvara, que tomó parte en su construcción, para que no pudiese construir un palacio similar. De hecho, dicen que una de las cabezas que adorna el frontispicio, en la fachada, es la del arquitecto, y que por las noches se oyen voces y ruidos en las salas cerradas, provocados por él.

Muchas de estas anomalías fueron recogidas en los Avisos de Madrid, como golpes pausados que se escuchaban durante la noche, en lugares como la capilla o la torre; o la muerte de uno de los sirvientes tras acudir a la misa de la Iglesia del Buen Suceso, donde dijo haber visto a la propia muerte.

Y vosotros, ¿qué pensáis sobre todo esto? Seguro que ahora, cuando paséis por allí, os fijaréis más en las cabezas del frontispicio preguntándoos si alguna de ellas es la verdadera cabeza del arquitecto asesinado... ¡Pero cuidado! Puede que sea cierto, y os devuelva la mirada y sepa que os habéis enterado de todo lo que os acabamos de contar...